Hackear la ciudad: cuando el ciudadano va por delante
Uno de los principios del funcionamiento del gobierno es escuchar a la ciudadanía para adaptar los proyectos, infraestructuras y políticas a las necesidades sociales. Pero cuando el ciudadano siente que no se le escucha comienzan a tomar las riendas de estos proyectos y a llevar a cabo iniciativas que, en principio, deberían ser cosa del estado. Ha pasado siempre en el campo social, por ejemplos a través de la actividad de las ONG’s. Lo raro es que suceda en el urbanismo, pero cada vez es más usual ver como colectivos ciudadanos realizan acciones de urban hacking o urbanismo de guerrilla. A camino entre acto de desobediencia ciudadana y performance artística, algunos colectivos han decidido reapropiarse del espacio urbano para expresar ideas de una forma u otra. En general supone una reflexión sobre el territorio y la planificación urbana que pretende luchar con procesos como el de la ‘gentrificación’ de las ciudades.
Vivero de Iniciativas Ciudadanas (España)
[VIC] Vivero de Iniciativas Ciudadanas es una plataforma abierta, colaborativa y orientada a promover, difundir, analizar y apoyar iniciativas y procesos críticos con ánimo propositivo de la ciudadanía, con especial incidencia en la transferencias al territorio, la ciudad y el espacio público.
Make your city collective (México)
Para el año 2012 el gobierno municipal de México C.F. había anunciado la inauguración de 300 kilómetros de carril bici, pero en 2011 se había ejecutado un porcentaje muy bajo del mismo y el propio gobierno alegaba una falta de presupuesto para la acometida final del proyecto. Ante esta situación el colectivo ciudadano Make your city diseñaron y ejecutaron su propio ‘carril bici de guerrilla’. Un grupo de 80 personas y con un presupuesto de mil dólares pintaron durante una noche cinco kilómetros de carril bici.
La intervención urbana es también un arma reivindicativa, pero a la vez este tipo de iniciativas expresan la voluntad de las personas en tomar un rol más activo en el desarrollo de las mismas.
Estaesunaplaza (España)
De nuevo la falta de infraestructuras y espacios públicos en el centro de la ciudad es el motivo de este proyecto. Estaesunaplaza parte de la iniciativa de un grupo de estudiantes y jóvenes profesionales que reconvierten un solar cerrado durante 30 años en el barrio de Lavapiés (Madrid), en un espacio común para el uso de los vecinos.
El proyecto comienza con la gestión con el Ayuntamiento que cede a este grupo autogestionado el terreno, de modo que puedan habilitarlo y realizar actividades a través de un modelo de gestión en el que cualquier persona puede disponer del espacio y realizar actividades.
ACUPUNTURA URBANA
Las intervenciones a gran escala, como estadios, centros de convenciones o grandes parques, requieren una gran inversión en tiempo y capital político, social y financiero. Sin embargo, el beneficio social y económico a largo plazo no puede asegurarse. Las estrategias de urbanismo low cost, también llamadas ‘urbanismo táctico’ o city repair, responden a este problema de financiación dando respuestas más rápidas. “Las mejoras a pequeña escala se ven cada vez más como una forma de realizar inversiones sustanciales. Este enfoque permite que una gran cantidad de actores locales puedan poner a prueba nuevos conceptos antes de hacer compromisos políticos y financieros importantes” (Varios autores, Tacticians). Otra de las ventajas es que permite observar los resultados en tiempo real, incluso durante su implementación.
Chair Bombing (USA)
Cuestiones sencillas como la disponibilidad de zonas de asiento cómodas en los espacios públicos marcan la diferencia entre un lugar habitado y otro simplemente de paso. Chair Bombing es una iniciativa llevada a cabo por el colectivo DoTank de Brookling, propietarios de locales comerciales y pequeños comerciantes.
La actividad consistió en diseñar y producir asientos con palets y otros materiales de desecho y ubicarlos en la calle para el disfrute de los viandantes para conseguir que las calles fueran más agradables.
Guerrilla Gardening (USA)
El grupo Green Guerrilla nace en 1973 de la mano de Liz Christy, aunque hoy en día es un movimiento global cuyo objetivo es introducir más espacios verdes en el entorno urbano. A modo de acción subversiva los miembros de este colectivo convierten espacios tanto públicos como privados en pequeños contenedores verdes, sin ningún tipo de permiso oficial.
El primer jardín urbano fue creado en una plaza de parking en la ciudad de Nueva York. Actualmente este pequeño espacio verde sigue existiendo y es mantenido por el departamento de parques de la ciudad.
Depave (USA)
Algunas zonas de Portland sufren un problema grave pues su sistema de alcantarillado no tiene capacidad de absorción para todo el caudal de aguas generado por las lluvias, lo que genera un grave problema higiénico y estético en las calles de la ciudad. Además el agua de las precipitaciones estaba contaminando el agua de los canales de la ciudad. En 2007 surge la iniciativa Depave llevaba a cabo por vecinos y asociaciones de la ciudad. El objetivo era sencillo: retirar miles de metros cuadrados de hormigón para recuperar el suelo de tierra. De este modo la vía pública incrementaba capacidad de absorción de aguas fluviales y se podría recuperar este espacio para otros usos, como parques o zonas de cultivo.
Lo que comenzó como una iniciativa ciudadana en 2007 ha ido ganando benefactores a través de donaciones tanto de instituciones públicas del gobierno de Oregón, como de empresas privadas. Además, centenares de vecinos, escuelas y departamentos gubernamentales se han unido activamente en las tareas. A día de hoy, Depave ha transformado más de 30.000 m2 en parques, huertos, ampliaciones para patios de escuelas públicas.